¡Con la necesidad urgente que tengo de un buen fontanero, bienvenido!
Hay asuntos más opinables que otros y algunos que no los son en absoluto. Sigo manteniendo que lo repetable es la persona; si el respeto personal es mutuo vendrá el diálogo fecundo: la mayoría de las personas son capaces de apearse del burro si, con respeto y argumentos, se les muestra que están equivocadas y en otros casos en susntos muy opinables se les amplían horizontes. Por ejemplo, en su profesión no sería opinable el material de los tubos por los que pasa el gas aunque sí una mejor distribucion de los mismos.
Saludos